miércoles, 11 de octubre de 2023

Reseña de la novela "El ojo de Goliat" de Diego Muzzio

 El Ojo de Goliat es el último libro de Diego Muzzio y también su primera novela.



Presenta una fuerte tesis sobre qué significa estar loco, qué es la locura y cuáles son sus límites. Con un relevamiento de los fines del siglo XIX y el principio XX, Muzzio nos trae un vívido escenario que nos enmarca en una época lejana y a la vez cercana. Los vestigios de una revolución industrial racionalista han generado una guerra con consecuencias físicas y psicológicas que varios pensaban habían quedado atrás. 
Muzzio presenta la primera guerra mundial como una consecuencia también de las grietas de un modelo industrial abocado a la catalogación del mundo en un algoritmo binario. Buenos vs. malos, locos vs. cuerdos, ¨Us and them¨ como diría Pink Floyd. Aquella guerra, como tantas otras, ha dejado a sus sobrevivientes por momentos, más muertos que vivos.
Este trabajo de construir un marco realista donde luego anteponer un contrapunto cuasi irreal, ya lo habíamos visto en la triología de nouvelles Las esferas invisibles: allí volvemos al fin del gobierno de Juan Manuel de Rosas y la crisis sanitaria con la fiebre amarilla en Buenos Aires.
En el caso de este nuevo texto, es otra la guerra y otras las enfermedades, pero el terror, el tedio y el misterio acechan.
En un hospital de Edimburgo uno de los protagonistas de esta novela, el doctor Pierce, busca revertir aquellas simples ecuaciones binarias, o al menos mostrar su problemática con el caso de un empleado de una empresa de faros. El caso es casi perfecto, el faro, símbolo de racionalidad, tecnología, símbolo de dominación de las aguas y los vientos, constituye en esta historia el lugar donde la locura del otro protagonista de la novela, David Bradley, se desata.
Si en Las esferas invisibles hay referencia al mundo decimonónico de Melville, aquí tenemos la referencia constante de la literatura de Stevenson y su clásico 'Dr. Jekyll y Mr Hyde'. Otras referencias, sin embargo, aparecen: las alusiones a la Biblia en especial el libro de Samuel, las poesías de Samuel Coleridge y las divisiones infernales de Dante Alighieri.
Esto entreteje un mundo de complicidades, de lecturas posibles e interpretaciones que nos invitan a seguir leyendo o volver hacia esos clásicos del Siglo XIX o anteriores.
En una era de posverdad, donde hoy cancelamos o nos volvemos fanáticos de un instante al otro, El Ojo de Goliat nos recuerda las contradicciones que llevamos adentro. Nos invita a hacernos preguntas, a pensar antes que actuar, a recordar antes que olvidar, pero sobre todo a aceptar el misterio como algo ineludible del estar vivos. La literatura quizás sea eso que nos recuerda que las campanas siempre doblan por nosotros.

miércoles, 13 de septiembre de 2023

Retoñar - Dan Pocetti


 Su comienzo, (track 1) "Introducción a la noche inducida" nos habla de un punto de partida, un principio, una preparación nocturna. Es una mixtura entre balada de noche, machaque de punk rock y bolero romántico. La misma nos conduce a inclinar esa copa de vino y dirigirnos hacia el infinito.


Luego de un misterioso desenlace, podemos percibir un nuevo llamado (track 2). Hay una sensación de señal. Esa intuición única, propia del agente especial Dale Cooper en Twin Peaks. Esta vez la búsqueda es realmente personal, liviana, hay una invitación al despertar."Golpeando las puertas del espejo" abre el portal y nos lleva a tomarnos el tiempo que necesitemos para transitar nuestro camino y comprender que lo esencial del ser es único y no se transforma. Como es arriba es abajo, como es el lago es el cielo.

Suspendidos en la atmósfera, lo terrenal quedó atrás. Flotamos como el paracaidista que queda boyando en el cielo (track 3). Como astronauta en Interstellar. No existe el tiempo y la búsqueda es infinita. La propia transición, nos genera incertidumbre, pero debemos recordar que, aunque no lo sepamos, hacia algún lugar nos dirigimos y debemos confiar. "Algo va pasar" dijo Sri Ram en sus años de iniciación.

Como aterrizaje en ala delta, un poco repentino pero con estilo, llegamos a los ojos de Ivanka (track 4). Una mirada que nos canta una simple canción. Nos muestra la esperanza, la dulzura y una sensación de amor cíclico. Confiar no fue en vano, y empezamos a recordar que esto ya lo vivimos. Intenso como nunca, atravesamos el elixir. Ayer todo era rubato y sin darnos cuenta el tempo nos regala un pedazo de cielo. Vemos palomas volar por el aire.

Un groove de batería, bombo y redoblante (track 5)."Keep it nice, keep it simple" (mantenlo bello, mantenlo simple") dijo El Hefe, guitarrista de NOFX cuando explicó por qué no usaba pedales de efectos. Un paseo en bici, la simpleza, los amigos, la risa. Esa apreciación está conectada con el contemplar, observar serena, detenida y profundamente la divinidad de la vida, contemplarla en su máximo esplendor.

Si hablamos del despertar, hablamos de las mañanas, ese encanto que no deja de tentarnos (track 6). Fundamental para el compositor poder mostrar una inspiración tan grande, tan importante, atemporal y de proyección universal, como la música de Luis Alberto Spinetta. El sol no sabe dónde va y ninguno de nosotros sabe dónde vamos, lo importante es disfrutar, contemplar mientras vamos. La miel en tu ventana es un regalo que interviene en esta historia para dejar un mensaje de paz. Esta canción de L.A.S es realmente un rayo de sol, mucha luz, realmente no puedo imaginarme una mañana oscura. Hacia el final podemos reconocer una evocación a Fuji.

Bajamos profundo, muy profundo, a las entrañas de la tierra. Podemos imaginarnos como en un sueño, nos vemos algunos metros hacia abajo, entre raíces de árboles gigantes (track 7). Como la tapa de este álbum, vemos árboles en caída hacia un cielo de lago. Algo se está manifestando, algo está cumpliendo su ciclo, algo está terminando y también volviendo a empezar. El todo es circular, como vida y muerte, principio y final. Como esa conexión de amor divina entre abuelos y nietos. Tan lejos y tan cerca, el plano es el mismo. Debemos retornar, reconocer nuestra esencia, preguntarnos de qué estamos construidos, qué trajimos, qué vinimos a aprender, de qué nos disfrazaron, qué es lo que resuena en nuestros corazones, qué es eso que la vida nos muestra una y otra vez, qué escenarios nos pone delante de nuestros ojos para que aprendamos, para que sanemos, para que seamos felices. Vinimos a morir y a volver a nacer todas las veces que sea necesario. El retoño es parte de nuestra vida y nosotros decidimos si queremos entrar o perdernos el juego.
Brotar, florecer, reinventar un nuevo capítulo.

Retoñar.

Jerga - Sic Trio


Jerga es el álbum debut de Sic Trio. Al igual que su nombre indica no hay equivocación en esta yunta tripartita. Jerga presenta un argot a mitad de camino de varios cruces posibles. Un manifiesto contemporáneo que con su código se permite abrir fuera de las fronteras físicas y unir nuevas expresiones. 

Adolfo Trepiana y Noel Morroni son dos ex compañeros de La Escuela de Tango Orlando Goñi que se vuelven a juntar más de una década después. Cada uno con su camino recorrido ahora como compositores, unen el tango el jazz, el rock y la experimentación para traer junto al tercer integrante Nacho Coppolecchia, una interesante placa al catálogo de Ears and Eyes.

Pensamos en sombras que retornan, que se unen en un hip hop melancólico con mucho aire y olas de ritmo. Una música que nos permite bucear las profundidades de una superficie acuosa y atemporal. Nos sumergimos en el brillante ojo de este maelstrom rioplatense. Allí vemos un remolino de lengüetas libres que de la botonera del bandoneón se despiden. El piano ataca cada sector del pentagrama y se deja soltar de la mano de las intuiciones baterísticas.  Al igual que Ulises en su odisea busca retornar, aquí sentimos esa suspensión en el aire-agua sonoro, a mitad de camino entre retornar o quedarnos. No sabemos qué sigue. Estamos expectantes ante la incertidumbre métrica y tímbrica que navega Sic Trio. Quizás a este viaje en clave, también hace alusión Noosa. Aquella ciudad australiana, isla grande entre mares bravos y climas poderosos. Un viaje que puede tornarse agresivo e incluso extraño como en aquel sentido unheimlich que ensayara un Freud arrabalero. Un Freud que en vez de camisa y saco, viste una remera de Nik Bärtsch. 

Las aguas desde Australia, Argentina y Alemania se unen en un mismo eco lejano y oscuro aunque no sepamos del todo. Hay un fondo puro que resiste las falsas luces y que se permite encontrar un presente de diálogo y cuestionamiento. A ese núcleo acústico apunta Sic Trio. Un presente musicalizado en estéreo con el pasado y su tradición y por otro lado, el hype futurístico que nos adelantó la pandemia.

Jerga es un disco que habla entre sí llamándonos. Una atracción difícil de resistir, difícil no tirarse al agua y apostar. La música como un deus ex machina nos propone fervientemente entrar en el triángulo armónico y melódico de estos tres argentinos.  Podemos bienvenir,  o despedir lo que vemos: una nostalgia pura de originalidad.

TRACKLIST:

01 - Habrá (4:32): es el track que abre el disco, y representa a la perfección la búsqueda de Sic Trio, una manera contar una historia propia y original con un idioma sui generis.

02 - Despedida (3:08):  Partiendo desde una simpleza melódica, es una canción sin letra, como aquellas películas mudas a las que se acostumbraron nuestros abuelos.

03 - Maelström (3:22): es un track directo, un empujón de energía de principio a fin, el track más violento del disco. Una clara referencia a las andanzas escandinavas de los compositores de Sic Trio.

04 - A Lo Que Ves (2:28): Es una exploración minimalista en donde la calma se ve interrumpida con pensamientos inquietos. 

05 - Retorno (2:43): Es la sensación de estar suspendido en el aire sabiendo que lo que sigue es incierto: alea jacta est.

  

06 - Jerga (3:41): el track que da nombre al disco, explora un sonido denso y obsesivo, con estructuras constantes, que aparecen a lo largo de todo el tema.

07 - Noosa (4:59): el track que cierra el disco cuenta con una intro de piano y samples. Está inspirado en una experiencia psicodélica que sucedió en la mitad de un viaje interrumpido por la pandemia.